Pandemias, cambio climático, hambre y terrorismo son los nuevos retos que han sustituido a la Guerra Fría
Estos días se cumplen setenta y cinco años del lanzamiento de las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki. Setenta y cinco años ya desde que Little Boy y Fat Man abrieran las puertas del infierno.
De aquellos ataques que pusieron fin a la Segunda Guerra Mundial nos quedan unas cifras todavía confusas –entre 105.000 y 120.000 muertos− y un nombre para la historia, el Enola Gay, el avión que descargó el terror infinito sobre las ciudades japonesas mientras el capitán Robert Lewis, copiloto del bombardero, decía aquello de “Dios mío, ¿qué hemos hecho?”.
El aniversario llega en un momento especialmente trágico para la
humanidad, devastada por una pandemia de coronavirus que de momento va
camino de cobrarse más de un millón de muertos. El Papa Francisco
advirtió ayer de que “sólo sin armas nucleares puede el mundo aspirar a
la paz”.
Una afirmación ingenua, utópica, pero no exenta de una gran
verdad teniendo en cuenta que un puñado de potencias atómicas poseen un
arsenal de ojivas suficiente como para destruir el planeta diez mil
veces. El problema es que, curiosamente, la guerra nuclear, pese a que
sigue siendo una pesadilla inquietante, ha dejado de preocuparnos.
El
mundo de 2020 nada tiene que ver con el del 1945. Hoy asistimos a otra Guerra Fría más comercial, más soterrada, la que promueve Donald Trump contra el gigante chino, nuevo enemigo número 1 de los Estados Unidos de América,
y los virus se extienden por los cinco continentes dejando un rastro de
muertos y peste medieval.
Ese es el escenario distópico al que hemos
llegado por fin: una sociedad ultratecnologizada que agoniza a causa de
un ente microscópico que probablemente lleva latente miles de años.
El
fin del mundo puede empezar en cualquier momento, pero no necesariamente
porque al millonario inquilino de la Casa Blanca le dé por apretar el botón rojo del maletín nuclear.
El Apocalipsis
puede comenzar en cualquier momento y por múltiples causas, desde que a
un asiático le dé por darse un atracón de murciélago contaminado hasta
que la temperatura de la Tierra suba apenas un par de
grados.
Al igual que aquel fatídico 6 de agosto los pobres desgraciados
de Hiroshima vieron cómo el hongo letal se levantaba sobre sus cabezas,
abrasándolos en un gigantesco crematorio y sin comprender nada,
probablemente hoy no seamos conscientes de que estamos viviendo con
nuestros propios ojos el final de los tiempos.
Arrinconados por una pandemia que no sabemos cuándo acabará, nadie
está a salvo en ninguna parte.
El concepto seguridad ha perdido todo su
significado y el mundo controlable se ha reducido a las cuatro paredes
de nuestro pequeño hogar.
Nuevas epidemias y enfermedades, crisis
económicas ruinosas, hambre, revueltas sociales, fascismo emergente,
negacionismos, fanatismos, colapso energético, terrorismo a gran escala…
La lista de gigantescos cataclismos que nos espera es larga y sin duda
en el primer puesto se encuentra el inevitable cambio climático, que se
ha acelerado exponencialmente y amenaza con convertir el planeta, en
menos de un siglo, en una bola seca, muerta y ardiente sin un solo
rastro de vida en su superficie.
El calentamiento global es un hecho y
probablemente ha matado ya a más personas que las que perdieron la vida
en los dramáticos bombardeos del Japón.
Sufrimos un
genocidio silencioso (el provocado por un 1 por ciento de las élites que
controlan el 99 por ciento de la riqueza del planeta) y jamás sabremos a
ciencia cierta cuánta gente va a morir a causa del coronavirus.
Estos bombardeos del 6 y 9 de agosto de 1945 precipitaron la rendición de Japón y el final de la II Guerra Mundial.
Han pasado 75 años desde que los bombarderos estadounidenses Enola Gay y Bockscar arrojaran sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki las primeras, y hasta ahora únicas, bombas nucleares usadas contra civiles.
Estos bombardeos del 6 y 9 de agosto de 1945 precipitaron la rendición de Japón y el final de la II Guerra Mundial.
Los bombarderos
El Enola Gay fue el avión que el 6 de agosto de 1945 soltó sobre la ciudad de Hiroshima la primera bomba nuclear utilizada en combate real y bautizada como Little Boy.
La aeronave, pilotada por el coronel Paul Tibbets y con otros once
tripulantes, estuvo acompañada en la misión por otros cuatro aparatos,
dos de reconocimiento y dos que volaron junto a ella con instrumental de
medición y labores fotográficas, The Great Artiste y un aeroplano sin nombre posteriormente renombrado Necessary Evil.
El Enola Gay también participaría en la operación de
Nagasaki (pilotado por George W. Marquardt), como avión de
reconocimiento del objetivo primario del bombardeo, Kokura, que
actualmente forma parte de la ciudad de Kitakyushu (sudoeste).
El bombardero que el 9 de agosto de 1945 soltó la bomba atómica Fat Man sobre Nagasaki fue Bockscar.
En la aeronave viajaban trece tripulantes, comandados y pilotados por
Charles W. Sweeney, que ya había participado en el ataque a Hiroshima a
los mandos de la aeronave que se le asignaba habitualmente, The Great Artiste.
Cuando el Bockscar llegó a Kokura, la ciudad estaba cubierta
de nubes y humo por los incendios tras el bombardeo el día previo en la
cercana Yahata, hoy también parte de Kitakyushu. El avión puso entonces
rumbo a su objetivo secundario, Nagasaki, acompañado por The Great Artiste y The Big Stink.
Tanto el Enola Gay como el Bockscar eran bombarderos modelo Boeing B-29 Superfortress y parte de los Silverplate, nombre en clave de unas aeronaves con la bodega modificada para lanzar bombas atómicas.
Ambos aviones salieron de la base aérea North Field en Tinián (Islas
Marianas del Norte), bajo soberanía estadounidense tras su conquista en
la Segunda Guerra Mundial y desde donde partieron la mayoría de los
aviones que bombardearon Japón durante el conflicto.
Las bombas
La bomba nuclear Little Boy, responsable de la devastación en Hiroshima, fue construida con uranio-235, el único isótopo natural fisible del uranio.
El artefacto explotó a las 08:15 a unos 600 metros de altura. La
detonación provocó una explosión equivalente a 16 kilotones de TNT y se
calcula que destruyó cerca del 70 % de la ciudad.
La bomba Fat Man arrojada sobre Nagasaki se fabricó principalmente con plutonio-239,
un elemento sintético. Su sistema de detonación era más complejo, así
que se probó con anterioridad en la denominada Prueba Trinity del 16 de
julio de 1945 en un área desértica de Nuevo México (EE. UU.).
El 9 de agosto, Fat Man fue arrojada sobre Nagasaki. Explotó
a las 11:02 a unos 470 metros de altura, con una detonación equivalente
a 21 kilotones de TNT. Más del 40 % de la ciudad fue destruida.
Las víctimas
La bomba de Hiroshima acabó de forma inmediata con la vida de unas 80 000 personas, cerca del 30 % de la población de entonces. A finales de 1945 el balance se elevaba a unas 140 000 y en los años posteriores las víctimas por los efectos de la radiación sumaron más del doble.
En el momento del bombardeo, Hiroshima era una base menor de
abastecimiento y logística para el ejército imperial japonés, aunque en
los alrededores había algunos campamentos y dos importantes enclaves de
la división que comandaba la defensa del sur del país.
Nagasaki ha sido durante siglos uno de los puertos más importantes
del sur de Japón y tuvo gran importancia durante la Segunda Guerra
Mundial por su actividad comercial, que incluyó producción naviera, de
artillería y otro equipamiento militar.
Se calcula que ambos bombardeos son responsables de la muerte de cerca de 400 000 personas hasta la actualidad.
Guterres pide la "eliminación" de las armas nucleares y lamenta que el mundo sigue "sin lograr ese objetivo"
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha pedido a los Estados, especialmente a los poseedores de armas nucleares, la "eliminación total" de las mismas, al tiempo que ha lamentado que el mundo sigue "sin lograr ese objetivo".
Así se ha expresado con motivo de la conmemoración del 75º
aniversario del lanzamiento de la bomba atómica sobre la ciudad japonesa
de Hiroshima.
"Desde sus primeros días y resoluciones, la ONU ha reconocido la
necesidad de eliminar por completo las armas nucleares", ha insistido,
remarcando que el nacimiento del organismo, ese mismo año, está ligado a
la historia de Hiroshima y Nagasaki.
A juicio de Guterres, "el riesgo de que las armas nucleares se usen,
ya sea intencionalmente, por accidente o por falta de cálculo es
demasiado alto como para que continúe esa tendencia".
En este sentido,
ha afirmado que ahora es el momento de dialogar sobre el asunto y ha
instado a salvaguardar y fortalecer los instrumentos y políticas de no
proliferación y desarme.
"Los Estados tendrán la oportunidad de retornar a esta visión
compartida el próximo año durante la conferencia para revisar el Tratado
de No Proliferación de Armas Nucleares", ha especificado, subrayando
que este instrumento es un "pilar" del régimen de desarme que espera que
entre en vigor.
Asimismo, ha agregado que la red de control de armas y los
instrumentos creados durante la Guerra Fría y los años que le siguieron
para propiciar la confianza y la transparencia se están "deshilachando".
De forma paralela, ha advertido de que la "división, desconfianza y
falta de diálogo" amenazan con una vuelta a la carrera balística
incontrolada.
La periodista ha subrayado que no ha sido fácil que Juan Carlos I
firmase la carta porque ni siquiera la ha escrito él. Según su
testimonio, el padre de Felipe VI no estaba de acuerdo con abandonar el
país argumentando que existe la presunción de inocencia.
“Judicialmente
es verdad. Ahora, aquí se habla de otra cosa yo creo. Lo que se está
hablando es de si ha sido ejemplar o no lo que hemos conocido”, ha
explicado Jaén, que ha recordado que los reyes seguirán con su agenda y
en los próximos días irán de vacaciones a Mallorca.
“Si lo que se intenta es poner un cortafuegos, lo que no vas a hacer
es alterar la normalidad de lo que es la familia real porque el resto es
la familia del rey”, ha zanjado.
Como destaca Vanity Fair, Esther Jaén forma parte del exclusivo grupo que componen otras periodistas como Sonsoles Ónega o Sagrario Ruiz de Apodaca con el que Letizia organiza sus salidas privadas.
BEIRUT Una potente explosión se produjo en el área del
puerto de la capital libanesa de Beirut, comunicó un corresponsal de
Sputnik.
Gran explosión en Beirut
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Se precisa que la explosión fue precedida por un pequeño estallido.
El corresponsal agrega que pasados unos cinco minutos apareció humo
blanco y negro. Luego ocurrió una poderosa explosión y una columna de
humo rojo se elevó hacia el cielo.
La onda expansiva rompió los vidrios de las casas circundantes, así como de las viviendas a varios kilómetros del epicentro.
"Al principio, empezó un fuerte viento por la ventana que se
intensificó a lo largo de varios segundos... y después comenzó un fuerte
silbido y el terremoto. Las paredes y las ventanas se pusieron a
temblar...
Y solo entonces la ola empezó a derribar las ventanas.
Escuchamos el sonido de una explosión y el temblor se intensificó. Todo
siguió derrumbándose durante 10 minutos. La gente comenzó a salir
corriendo de sus casas en pánico. Y después se hizo el silencio",
relatan los testigos.
Decenas de personas en las calles cerca del epicentro de la explosión
sufrieron lesiones causadas por fragmentos de vidrios rotos.
"Hay muchos heridos, en primer lugar
debido al vidrio. Más cerca del puerto, varias casas están destruidas,
allí, según nuestra información, podían permanecer personas debajo de
los escombros", dijo a Sputnik un representante de la Cruz Roja.
Según los medios libaneses, la explosión podría ser causada por un incendio en uno de los almacenes de la pirotecnia.
Al menos 78 personas fallecieron y más de 4.000 resultaron heridas
tras una explosión, informó la cadena Al Jazeera, citando los datos del
Ministerio de Salud del Líbano.
Antes se informaba de 73 muertos y unos 3.000 heridos.
"El número de víctimas de la explosión aumentó hasta 78, más de 4.000 resultaron heridos", dice el medio.
Se indica que las autoridades prevén que el número de víctimas
aumente, ya que numerosas personas se han dado por desaparecidas y los
servicios de rescate continúan recuperando a los atrapados entre los
escombros de los edificios afectados por la explosión.
En el lugar de la explosión trabajan más de 30 brigadas de la Cruz Roja.
"Es imposible imaginar el sonido y la
onda expansiva de la explosión. Esta es quizás la mayor explosión en el
país en los últimos años. Esto se puede ver en la cantidad de
destrucción en la ciudad. Hasta fueron dañados los edificios ubicados a
una distancia suficientemente grande del lugar del accidente", dijo a
Sputnik el ministro de Información libanés, Manal Abdel Samad.
También enfatizó que había solo una explosión, no una tras otra, como se informó inicialmente.
Las consecuencias de la explosión en Beirut
El Ministerio de Salud del Líbano pidió a todos los hospitales de la
capital que se movilicen de inmediato y salven la vida de los heridos.
Para esto, se asignarán partidas presupuestarias de las arcas del
Ministerio.
Al-Mayadin comunica que, según los primeros datos, la explosión no es un ataque terrorista.
El Ministerio del Interior no se ha pronunciado hasta ahora.
La conexión móvil en la capital funciona con interrupciones. En
algunas áreas hay cortes de electricidad y no hay conexión telefónica
debido a la explosión.
Sputnik pudo constatar que los helicópteros están participando en la extinción del incendio en la zona de explosión.
El gobernador de Beirut, Marwan Abboud, afirmó que la explosión ha afectado la mitad de la ciudad.
"Las consecuencias son graves. La mitad de los edificios en Beirut están dañados", dijo Abboud.
El gobernador calificó de "desastre nacional" la explosión que se produjo en Beirut.
Además informó que se perdió la comunicación con una de las brigadas
de bomberos que se dirigió al área de la explosión y su ubicación
actualmente se desconoce.
A su vez, la Embajada de Rusia en el Líbano declaró a Sputnik que la
sede de la misión diplomática sufrió daños leves por la explosión.
"Aproximadamente entre las 18.15 y 18.19 hora local se produjo una
explosión en la zona del puerto de Beirut. Según la versión preliminar,
la explosión ocurrió en uno de los hangares donde se almacenaban los
productos pirotécnicos destinados para una fiesta", dijo una fuente de
la Embajada.
Agregó que "posiblemente la explosión haya tenido un impulso
adicional por estar cerca un almacén con bombonas de gas doméstico".
Según la fuente de la misión diplomática rusa, el área de destrucción por la explosión es "bastante grande".
Comentarios de la ONU
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) no está en condiciones
de comentar la explosión en Beirut ya que no puede determinar si fue
accidental o deliberada, dijo a periodistas el portavoz del foro
mundial, Farhan Haq.
"No tenemos información precisa sobre lo que ocurrió, sobre qué lo
causó, o sobre si fue accidental o un acto provocado por el hombre",
indicó.
Reacción de EEUU
EEUU está monitoreando muy de cerca la gran explosión ocurrida en
Beirut y está estudiando detenidamente el incidente, dijo la secretaria
de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany durante una rueda de
prensa.
"Estamos monitoreando [la situación] muy de cerca y solo quiero
garantizar que estamos estudiando detenidamente el episodio", dijo la
vocera.
Por su parte, un portavoz del Departamento de Estado en un comunicado
obtenido por Sputnik señaló que EEUU está cooperando estrechamente con
el Gobierno libanés para determinar si ciudadanos estadounidenses fueron
afectados por la explosión masiva ocurrida en Beirut.
"Estamos trabajando estrechamente con
las autoridades locales para determinar si algún ciudadano
estadounidense se vio afectado", dijo el portavoz del Departamento de
Estado.
Washington instó a estadounidenses en las áreas afectadas contactar a
sus familias y comunicarse con las autoridades locales si necesitan
ayuda, agregó el portavoz.
Militares de la Marina de Brasil en el Líbano, a salvo
Los militares de Brasil presentes en una misión en el Líbano están en
buen estado, según informó la Marina poco después de la explosión.
Según informó la Marina en Twitter, "todos los militares componentes
de la Operación Marítima UNIFIL de la Marina de Brasil están bien y no
hay heridos".
Según la Marina, la fragata Independencia se encuentra operando en el
mar con normalidad, ya que el barco estaba lejos del lugar de la
explosión.
El ministerio de Relaciones Exteriores brasileño informó que "no hay, de
momento, noticia de ciudadanos brasileños muertos o gravemente
heridos", y destacó que en cualquier caso podría prestar la asistencia
consular necesaria.
El Gobierno brasileño también expresó su solidaridad con el pueblo y
el Gobierno libanés por las víctimas fatales y los heridos y remarcó que
sigue de cerca la situación a través de la embajada en el país.
Según los medios locales, el edificio de la embajada de Brasil en
Beirut habría sufrido algunos daños materiales a raíz de la explosión, a
pesar de que se encuentra alejada del puerto de la ciudad.
Bélgica informa de dos funcionarios de su embajada heridos
"Las destrucciones tras la explosión
en Beirut son enormes. El edificio de nuestra embajada quedó dañado. Dos
funcionarios de la embajada y dos miembros de sus familias sufrieron
lesiones leves", tuiteó el ministro de Exteriores de Bélgica, Philippe
Goffin.
Goffin señaló que llamó por teléfono a la embajada del Líbano en
Bruselas "para expresar la solidaridad de Bélgica y ofrecer ayuda en la
mitigación de las consecuencias de esta terrible explosión".
La OMS envía a Beirut medicamentos y kits quirúrgicos
A partir de una solicitud presentada por el ministro de Salud justo
tras la explosión, la OMS envía botiquines de atención de traumas con
medicamentos de emergencia necesarios para atender a 500 personas
heridas, y kits quirúrgicos con materiales para tratar a 500 personas
cuyo estado requiere intervención quirúrgica", informó a Sputnik la
portavoz de la OMS Inas Hamam.
Hamam señaló que la OMS está dispuesta a enviar más materiales si es necesario.
"La OMS mantiene un contacto permanente con las autoridades locales
(tanto con el ministro de Salud como con los hospitales que atienden a
los heridos) para aclarar qué más necesidades tienen y garantizar un
apoyo inmediato", indicó.
El tabloide germano, conocido por sus contundentes calificativos, no duda en catalogar de “huida” la decisión del rey y llega a afirmar, entre exclamaciones, que se va ¡en medio de un escándalo financiero! (sic).
Con el antetítulo de “Sospechoso de corrupción”, el artículo hace un
repaso por el comunicado oficial de la Casa Real y se hace eco de
publicaciones españolas como El Mundo.
“Durante las cuatro décadas en que fue rey y jefe de estado de
España (del 22 de noviembre de 1975 al 14 de junio de 2014), Juan Carlos
disfrutó de inmunidad. Después de renunciar al trono a favor de su
hijo, todavía tiene derechos especiales hoy, pero el Tribunal Supremo
puede colocarlo en el banquillo de los acusados”, continúa Bild, que cita como causa el posible “lavado de dinero posterior a 2014 en relación con el escándalo”.
El rey Juan Carlos I abandona España
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Juan
Carlos I quedará registrado en los libros de Historia, con razón, como
un mal rey. O, cuando menos, como máximo representante de un reinado que
dilapidó el mayor caudal ciudadano de respeto, admiración y —hasta
cierto punto— servilismo del que ha gozado jamás un monarca en la
historia de España.
En una
situación como la actual deben diferenciarse dos debates: el de la
institución monárquica y otro, muy diferente, el de determinar si, como
reinado, el que encarnó Juan Carlos I fue positivo o no para la Historia
de España.
Por muy republicano que se sea y se sienta, lo cierto es que
la contribución que hizo el rey a la implantación y desarrollo de la
democracia en España fue decisiva. Muy pocos podrán negarlo.
El rey hizo lo único posible para
afianzar el paso de la dictadura a la democracia. En este caso, el fin
sí justificaba los medios. Da igual cuántos abrazos dio a Franco: lo
importante es que fueron abrazos de oso.
Esa lástima ha derivado en una insoportable indignación popular
En
cualquier caso, el rey no fue la persona que, en solitario y con un
equilibrismo encomiable, puso rumbo hacia la democracia. Nada podría
haber salido bien sin el pragmatismo y la altura política de personas
como Santiago Carrillo, Adolfo Suárez o Felipe González.
La Transición,
escrito está ya mil veces, fue un ejercicio sin apenas fisuras ejecutado
con una eficacia muy pocas veces vista. Un trabajo conjunto en el que
el rey no fue todo, pero sí se
convirtió en una parte imprescindible para superar 40 años de tiranía
con una lógica política que muchos países se afanaron en emular con
posterioridad.
Ahora
se marcha de España el que, en el mejor de los casos, será conocido por
las generaciones futuras como el rey campechano, un monarca que lució
con todo su esplendor hasta 1992. El día que se apagó el pebetero de los
Juegos Olímpicos de Barcelona comenzó también el declive de su reinado,
hasta explotar hecho mil pedazos dejando un olor insoportable con el
cambio de siglo.
A partir
de 2005, Juan Carlos I se convirtió más en un Amadeo de Saboya que en un
Carlos III. No puede haber nada peor para una persona que se ha movido
entre el respeto reverencial y la admiración que empezar a generar
lástima.
Y eso fue, precisamente, lo que suscitó el rey en sus últimos
años de mandato.
Esa lástima ha derivado en una insoportable indignación
popular.
Perdió el pulso social, se alejó de la realidad del país y, al final, fue el propio país el que se alejó de su rey
De
los muchos errores que cometió, sin duda el que le liquidó como monarca
y le obligó a abdicar en favor de su hijo no fueron sus recurrentes
enfermedades, sus cacerías o sus amores extraoficiales.
El gran fallo
fue su caída en comportamientos indignos hasta el punto de perder el
pulso de la sociedad sobre la que reinaba.
Dejó de ver ciudadanos para
ver súbditos. Se alejó de la realidad del país y, al final, fue el
propio país el que se ha alejado de su rey.
Un
distanciamiento que en 2020 ha alcanzado cotas siderales.
Ni los
juancarlistas de toda la vida tienen ya la cintura para justificar los
presuntos trapicheos de un rey que se creyó impune para hacer y deshacer
resguardado en una muy mal entendida inviolabilidad.
No es tolerable,
nunca lo puede ser, que la persona que debe servir de ejemplo a los
ciudadanos (a sus súbditos) realice movimientos opacos en una cuenta
suiza oculta.
Borbón y bribón deberían ser sólo una rima, no un
sinónimo.
Alfonso XIII abandonó España en 1931, dando pie a
la proclamación de la II República, tras constatar que no contaba con
el amor de su pueblo.
Tampoco lo tiene ya Juan Carlos I.
La Casa Real
vive su futuro más incierto y su gestión de los tejemanejes del rey
emérito no da pie a ser optimista: Felipe VI anunció la renuncia a la
herencia de Juan Carlos I el primer día del confinamiento y elige el
primer lunes de agosto para informar del ‘exilio’ real.
Juan
Carlos I ya no cuenta con el amor de su pueblo, como le ocurrió a su
abuelo. De cómo gestione Felipe VI la crisis abierta por su padre
dependerá su reinado y, por extensión, la pervivencia de la monarquía en
España.
Hasta ahora no parece que esté poniendo demasiado empeño en mantenerlos.
El anuncio del rey emérito ha protagonizado titulares en todo el mundo
que destacan que decide abandonar España en plena investigación judicial
de sus finanzas
La decisión del rey emérito Juan Carlos I de abandonar España "ante la
repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados"
de su "vida privada" ha protagonizado titulares en todo el mundo.
La
prensa internacional, que en algunas ocasiones habla de exilio y en
otras de "sorpresa", subraya que el anuncio se produce en plena
investigación judicial de sus finanzas.
"El exrey de España, golpeado por los escándalos, se irá al exilio", sostiene el diario británico The Guardian en el titular del artículo firmado por su corresponsal en Madrid, Sam Jones, quien escribe que la decisión
llega tras "una serie de acusaciones perjudiciales sobre sus asuntos
financieros que han dañado la reputación de la monarquía y avergonzado a
su hijo, el rey Felipe".
La cadena británica BBC encabeza el artículo de su versión web
con un: "El acorralado exrey de España Juan Carlos abandonará el país".
"Es una salida humillante para un rey que parecía destinado a pasar a
la historia como el líder que guió hábilmente a España de la dictadura a
la democracia después de la muerte del General Franco en 1975", reza la
noticia de la BBC.
En el vecino Portugal,Diário de Noticiasabre su web con un "Juan Carlos anuncia que dejará de vivir en España". "El ex rey Juan Carlos deja España", indica, a su vez, el diario alemán Die Welt.
"Sorpresa en España: Juan Carlos se va a vivir al exterior tras los escándalos",titula el diario argentino La Nación. "Los
múltiples escándalos en los que se vio involucrado Juan Carlos en los
últimos tiempos habían empujado a la monarquía española a una de
sus peores crisis desde la transición democrática", señala el periódico
bonaerense.
Clarín, otro de los medios más leídos en el país latinoamericanos, encabeza su noticia con un "El rey Juan Carlos anuncia que abandona España tras una serie de escándalos".
Muy similar son los términos que usa uno de los diarios de mayor circulación de México, El Universal, que ha incluido la noticia en su revista de corazón, Clase: "El rey Juan Carlos de España abandona su país tras escándalos".
Juan Carlos I anuncia su exilio en plena investigación judicial sobre sus finanzas
El monarca envía
una carta a su hijo, el rey Felipe VI, en el que circunscribe las
investigaciones sobre su supuesto enriquecimiento ilícito en el ámbito
"privado"
75 AÑOS DEL MAYOR ATAQUE TERRORISTA CONTRA UNA POBLACION CIVIL: HIROSHIMA Y NAGASAKI. ¡VERGUENZA HUMANA!
EL 6 Y 9 de agosto de 1945 se produjo el mayor ataque
militar contra una población civil indefensa, solo por el hecho de
hacer ver al mundo que los EEUU tenia un arma poderosa y que sería el
amo del mundo y cómo que lo fue.
Recordemos que el 9 de mayo de ese año
(1945), ya había terminado la II guerra mundial con la destrucción del
ejercito nazi por el Ejercito Rojo y el judío Hitler había huido a
Sudamérica; así mismo, el Ejercito japonés estaba aniquilado, y sin
embargo, se lanzaron dos bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki,
donde ni siquiera existían cuarteles militares.
Algunos ilusos hablan de que las bombas atómicas se lanzaron por
venganza del ataque a Pearl Harbor, cuando este ataque se produjo el 7
de diciembre de 1941 (casi 4 años antes), en plena II Guerra Mundial y
las bombas atómicas se lanzaron el 6 Y 9 de agosto de 1945, cuando el
ejercito japonés y nazi ya no existían y se daba por terminada la
conflagración mundial; la firma de rendición del emperador de Japón
Hirohito solo fue una humillación, no había la necesidad de lanzar las
mortíferas bombas atómicas sobre abuelos mujeres y niños.
En
la conferencia de Yalta, el presidente de los EEUU (Truman), le dijo a
Stalin, que tenía una arma poderosa que dominaría al mundo, el líder
comunista le simuló indiferencia, el sabía que los Estados Unidos tenía
la bomba nuclear, y solo le contesto, "sería bueno que la pongas al
servicio de la humanidad"; Truman se sintió frustrado porque pensó que
iba a asustar a Stalin, y es cuando ideó probarla para que el mundo se
entere lo poderosa que era la bomba atómica.
Las ciudades de
Hiroshima y Nagasaki se escogieron porque estaban despejadas de nubes y
lucía el sol, querían que se viera y nadie tenga duda que su bomba era
mortífera, y así se produjo el mayor genocidio conocido en la historia
de la especie humana.
Truman era consciente a quién mataba,
tanto así, que cuando se valoró lanzar la tercer bomba sobre otra ciudad
nipona, este genocida explicó en una reunión con su gabinete el 10 de
agosto de aquél mismo año, sus reticencias a lanzar una tercera bomba
con estas palabras: “La idea era demasiado horrible”- dijo- no le
gustaba la perspectiva de matar “todos esos niños”.
Eliminar a otras
100.000 personas todos esos niños”.
Con aquel sacrificio
genocida el gobierno de los Estados Unidos de América y sus círculos
financieros tenían como único objetivo doblegar al resto del planeta e
imponer sobre él una hegemonía incontestada, especialmente sobre la URSS
que no logró doblegar, y sí terminó sucediendo con el resto del mundo.
Cristina Fallarás lo clava hablando de la monarquía en España
Cristina Fallarás lo raja todo sobre la monarquía española
***
*
Conozca las reacciones a la salida de Juan Carlos de Borbón de España
Después de que Zarzuela comunicase de manera oficial la decisión del rey emérito, Juan Carlos de Borbón, de marcharse de España, las reacciones no han dejado de producirse.
Los primeros en reaccionar han sido los republicanos catalanes (ERC), que han reprochado a Juan Carlos I
que “huya de la Justicia por corrupto en lugar de quedarse a dar la
cara con dignidad”. Así lo ha afirmado Carolina Telechea, portavoz
adjunta en el Congreso de los Diputados.
Por su parte, Unidas Podemos ha expresado sus
temores sobre la decisión del Borbón, señalando que pueda huir para
dificultar la investigación judicial, y ha sugerido que no se le debería
permitir marchar.
Aunque información publicada señala que una vez que
Zarzuela ha hecho pública la decisión, Juan Carlos ya estaría fuera de
España, por el momento en un destino desconocido.
El Partido Popular de Madrid ha expresado a través de Díaz Ayuso la
importancia del “trabajo histórico de Juan Carlos I, a quien se le deben
los mejores años de la democracia”. El alcalde de Madrid, Almeida, ha
trasladado todo su apoyo a Felipe VI y ha asegurado que Juan Carlos ha
sido clave para poder construir la democracia.
Un mensaje compartido por
el partido a nivel nacional, quien ha pedido la unidad en torno a
Felipe VI y a la Monarquía en estos momentos, una postura compartida
también por el PSOE, quien ha considerado que los hechos “privados” del
rey emérito no pueden salpicar al actual rey Felipe VI.
En este sentido,
precisamente, se ha expresado Moncloa, enfatizando la ejemplaridad de Felipe VI, y ha mostrado todo su apoyo, respetando la decisión de Juan Carlos I.
Sin embargo, Iglesias ha dicho que el Gobierno “no puede mirar hacia otro lado ante la indigna huída de Juan Carlos”.
Vox, por su parte, ha asegurado que la izquierda quiere un “linchamiento de Juan Carlos I, vivo o con los restos mortales”, según ha afirmado Macarena Olona.
Los Comunes han pedido una investigación y que el rey Felipe VI de explicaciones públicas por la marcha de su padre.
Errejón considera “escandaloso” que Juan Carlos I haya huído “sin rendir cuentas” y ha pedido que, al menos “devuelva el dinero”.
El presidente de Cantabria, Revilla, ha expresado que espera “que la Justicia haga su trabajo”.
Ciudadanos ha expresado su apoyo a Felipe VI, y su confianza en que contribuya a la ejemplaridad de la Casa Real.
Eh Bildu ha lamentado que Felipe VI no siga los pasos de su padre.
Colau considera que Juan Carlos I debe someterse a juicio y ha pedido un referéndum sobre la Monarquía.
Alberto Garzón (IU), ha pedido también que se juzgue a Juan Carlos I y que se encuentre a los cómplices de una trama que no podía mantener él solo.
Gabriel Rufián ha pedido que se le retire el pasaporte a Juan Carlos I, afirmando que “no será el último Borbón que se fugue por corruptelas”.
Una postura que ha defendido también Izquierda Unida.
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón considera que “la ley es igual para todos” y ha pedido respetar el trabajo de la justicia con Juan Carlos I.
Odón Elorza, PSOE, ha considerado “muy insuficiente” la carta publicada por la Zarzuela y exige transparencia fiscal para la corona española.
Javier Lambán, presidente de Aragón, espera que la decisión de Juan Carlos despeje definitivamente el futuro de la monarquía.
Corinna ha preferido no opinar y en redes sociales, Juan Carlos es Tendencia nacional.