Kelly Herron en la foto publicada después del intento de violación | Instagram: run_kiwi_run
"Tú tienes miedo, pero no puedes dejar que él lo sepa", explica la joven estadounidense que se salvó por unas clases de defensa personal de tan sólo dos horas programadas por su empresa de ser violada.
"Mi cara está cosida, mi cuerpo está magullado, pero mi espíritu está intacto", escribe en su Instagram.
Una corredora de Seattle ha conseguido escapar de una violación
gracias a las clases de defensa personal que había tomado semanas atrás.
Un hombre sin hogar intentó agredirla sexualmente cuando estaba en un baño público en el que él estaba escondido, según la policía.
Gary Steiner, de 40 años, le dio media docena de puñetazos en la cara a Kelly Herron hasta que la tiró al suelo y le bajó los pantalones con los que estaba entrenando para un maratón en el Golden Gardens Park.
Según cuenta la víctima, ella le comenzó a gritar diciéndole que no e insultándole, como le habían recomendado: "Hay que ser fuerte y no tener miedo.
Tú tienes miedo, pero no puedes dejar que él lo sepa".
En medio de esa lucha, Herron recordó lo aprendido en la clase de defensa de dos horas y que podía ser utilizado para escapar de la situación. Esos pensamientos eran lo "único" que la motivaron y no paraba de repetirse que no podía ser violada "por ese hombre en ese lugar".
Desde entonces, ella no quieren que la llamen víctima y da las gracias al curso de defensa personal, que fue programado por su empresa, por salvarle la vida. Por ello, ahora pide a otros negocios y compañías que impartan cursos con este contenido a su plantilla.
"Aprendí a poner huesos duros en las partes blandos y carnosos, así que empecé a golpear un lateral de su cabeza con mi mano", ha explicado durante una entrevista en Good Morning America, según recoge 'New York Daily News'.
Con esta técnica, en un momento del ataque logró escapar del baño y con la ayuda de algunos transeúntes mantuvo a Steiner encerrado hasta que llegó la policía. Cuando los agentes llegaron, le dijeron que "había hecho un buen trabajo".
Después del ataque, la chica compartió su historia en Instagram y cinco días después de haber sido publicada ya ha tiene más de 16.500 'me gusta'. "Mi cara está cosida, mi cuerpo está magullado, pero mi espíritu está intacto", escribió.
Steiner, un delincuente sexual de nivel 3, tiene antecedentes criminales y fue condenado por agredir a varias mujeres en Arizona.
Esta vez ha sido acusado de intento de violación y de asalto en segundo grado.
Un hombre sin hogar intentó agredirla sexualmente cuando estaba en un baño público en el que él estaba escondido, según la policía.
Gary Steiner, de 40 años, le dio media docena de puñetazos en la cara a Kelly Herron hasta que la tiró al suelo y le bajó los pantalones con los que estaba entrenando para un maratón en el Golden Gardens Park.
Según cuenta la víctima, ella le comenzó a gritar diciéndole que no e insultándole, como le habían recomendado: "Hay que ser fuerte y no tener miedo.
Tú tienes miedo, pero no puedes dejar que él lo sepa".
En medio de esa lucha, Herron recordó lo aprendido en la clase de defensa de dos horas y que podía ser utilizado para escapar de la situación. Esos pensamientos eran lo "único" que la motivaron y no paraba de repetirse que no podía ser violada "por ese hombre en ese lugar".
Desde entonces, ella no quieren que la llamen víctima y da las gracias al curso de defensa personal, que fue programado por su empresa, por salvarle la vida. Por ello, ahora pide a otros negocios y compañías que impartan cursos con este contenido a su plantilla.
"Aprendí a poner huesos duros en las partes blandos y carnosos, así que empecé a golpear un lateral de su cabeza con mi mano", ha explicado durante una entrevista en Good Morning America, según recoge 'New York Daily News'.
Con esta técnica, en un momento del ataque logró escapar del baño y con la ayuda de algunos transeúntes mantuvo a Steiner encerrado hasta que llegó la policía. Cuando los agentes llegaron, le dijeron que "había hecho un buen trabajo".
Después del ataque, la chica compartió su historia en Instagram y cinco días después de haber sido publicada ya ha tiene más de 16.500 'me gusta'. "Mi cara está cosida, mi cuerpo está magullado, pero mi espíritu está intacto", escribió.
Steiner, un delincuente sexual de nivel 3, tiene antecedentes criminales y fue condenado por agredir a varias mujeres en Arizona.
Esta vez ha sido acusado de intento de violación y de asalto en segundo grado.
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