Carmona.
72 horas ha tardado la nueva secretaria regional del
PSOE en Madrid, Sara Hernández, en tomar su primera decisión de calado.
Y no una decisión cualquiera. La Ejecutiva regional ha
destituido a su portavoz en el Ayuntamiento de Madrid, Antonio Miguel Carmona, y ha propuesto como sustituta a su
número dos,
Purificación Causapié. La mayoría de los concejales del grupo
socialista han ratificado el relevo en una votación que se ha producido a
última hora de este lunes.
Los cinco concejales más
próximos a la nueva líder del partido -tres de los cuales forman parte
de su ejecutiva, entre ellas Causapié- han votado a favor de "acatar" la
resolución de la dirección, según fuentes del grupo consultadas por
eldiario.es. En contra han votado el propio Carmona, Mar Espinar,
secretaria de Organización de la agrupación en la que milita el ya
exportavoz socialista; y José María Dávila, que fue uno de los hombres
fuertes de la campaña del diputado Juan Segovia frente a Hernández. El
otro concejal, Ransés Pérez, se encontraba fuera de Madrid y no ha
podido participar en la reunión pero en el grupo municipal se da por
hecho su apoyo a Carmona.
La razón esgrimida por la dirección regional para tomar
la decisión es el proceso de renovación interna en el que se ha sumido
el partido después de que el secretario general, Pedro Sánchez,
ordenara la intervención del PSM y la destitución de su líder,
Tomás Gómez.
Fuentes próximas a Hernández aseguran que esta maniobra entra dentro de
la "normalidad" cuando se forma una nueva dirección. Así, recuerdan
que Sánchez cambió todas las direcciones parlamentarias cuando sucedió a
Alfredo Pérez Rubalcaba.
Además, el secretario de
Organización del PSOE-M, Enrique Rico, ha señalado ante la prensa que
los resultados electorales del pasado 24M han pesado entre los motivos
para eliminar a Carmona. El economista encabezó la candidatura
socialista al Ayuntamiento de Madrid, pero fue superado no solo por
Esperanza Aguirre, sino también por Manuela Carmena. El PSOE se vio
entonces en la tesitura de permitir la investidura del PP o de Ahora
Madrid. Finalmente, optó por esta segunda opción.
Hernández da así un golpe de efecto tres días después del congreso extraordinario en el que su dirección se impuso
con un ajustado 55,49%
de los apoyos y avanza en el intento de restar capacidad de reacción a
los seguidores de Tomás Gómez.
Durante las primarias, Carmona se
posicionó junto al rival de Hernández, Juan Segovia, quien recabó casi
un 43% de los votos frente al 57% de la alcaldesa de Getafe. La
Ejecutiva, compuesta por los principales valedores de Pedro Sánchez en
Madrid, tuvo proporcionalmente menos respaldo que Hernández en su
elección directa como secretaria general. La figura del portavoz había
crecido desde el 24M, mostrándose como uno de los soportes de la
alcaldesa, Manuela Carmena.
Hernández y su Ejecutiva
se enfrentarán a un proceso congresual ordinario en 2016 que deberá
ratificar su liderazgo así como sus decisiones. Este es, según Carmona,
el motivo real que está detrás de su destitución. En una comparecencia
ante los medios, Carmona ha asegurado que la secretaria regional le ha
ofrecido un puesto de senador a cambio de abandonar su actual cargo sin
hacer ruido, pero que lo ha rechazado y ha comprometido que continuará
como concejal aunque pierda su condición de jefe del grupo.
"De fondo hay una cuestión interna, de división del partido", ha
señalado Carmona en una dura intervención. "Unos tratan de prescindir de
los otros. Una Ejecutiva con el 55% trata de prescindir del 45%", se ha
lamentado. Ante los periodistas, Carmona ha mostrado claramente sus
intenciones y ha lanzado un aviso a quien quiera escucharlo: "
Nos veremos dentro de siete meses,
por supuesto que nos veremos. Si hay algún compañero mejor, yo le
apoyaré; y si no, yo mismo", ha zanjado en relación al congreso previsto
para 2016.
Carmona ha lanzado un último mensaje a
los suyos: "Nadie se nos echará encima si no doblamos la espalda. Y yo
no doblo la espalda". Tras el congreso del pasado viernes, el sector más
próximo a Tomás Gómez encontró en la falta de integración un motivo
para dar la batalla en el cónclave que se celebrará dentro de siete u
ocho meses. "Con estas circunstancias, vamos a un congreso ordinario mañana mismo", auguraba un exdirigente el pasado viernes.
Acusaciones a Ferraz
El lenguaje utilizado por Carmona en su comparecencia anticipa una batalla entre tomasistas y
los seguidores de Sara Hernández, aupada al cargo por Pedro Sánchez. El
concejal madrileño, que se quejó ya en la campaña del 24M del
tratamiento que le daba la dirección nacional del partido, ha asegurado
que Hernández "no ha tomado esta decisión sola", en referencia a Ferraz,
donde se sitúa la sede del PSOE. A este respecto, Carmona ha anticipado
su postura para los próximos meses: "Lucharé hasta la ultima gota de
sudor para cambiar la dirección del partido".
La
decisión de la Ejecutiva regional ha sorprendido a los militantes y
cuadros del PSOE-M, sobre todo por las formas. Por eso, Carmona ha
invitado al Comité Regional del partido, el principal órgano entre
congresos "a ratificar esta decisión" en una votación.
La lista de delegados para el comité está encabezada por Carlos
Morales, que intentó sin éxito enfrentarse en primarias a Tomás Gómez
antes de su destitución y que ahora se ha posicionado del lado de
Hernández, que ha premiado a su entorno con un par de puestos en la
dirección. Fuentes próximas a Morales han señalado a eldiario.es que no
creen que esta medida, "pese a ser legítima", sea "eficaz para unir al
PSOE-M". "Se han enterado por la prensa y no había ninguna necesidad de
hacerlo así", ha señalado.
También se ha posicionado
en contra de la decisión Izquierda Socialista, que ya había criticado
durante el fin de semana "la falta de integración" de la Ejecutiva
salida del congreso extraordinario.
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