viernes, 21 de enero de 2022

Destrozando los marcos de las puertas de palacio allá por donde pasan. La chica de la peca«, ha terminado como su madre


 Otro culebrón 

 A la «Niña de la peca«, «Infanta de Naranja«, la que hizo ver en un juicio que era tonta y amnésica, la ha dejado aparcada el reo Urdangarin y, encima, ni le ha dejado el ticket de la OTA en la oreja.

 Iñaki ha tenido tiempo para pensar en soledad que es el único miembro de esa familia que se ha tenido que comer un marrón aunque, en realidad, ese señor no hacía otra cosa más que replicar lo que veía en su familia política. 

 Así, se vuelve a atisbar algo tan ajeno al Derecho Civil como otro «cese temporal de la convivencia«, término acuñado en 2007 entre Alberto Aza Arias (entonces jefe de la casa real) y Rouco Varela…

 Y, quince años después, aún sigue esa larga «temporalidad».

  Como decía, Urdangarin hizo lo que veía hacer a su suegro, le pudo la codicia y se embaló después de rozar una teta de Corinna.

 Hasta por su boda le regalaron el título de ESADE porque, al margen de brillante jugador de balonmano, no era nada.

 Acabó dando con sus huesos en una cárcel de mujeres y ahora hace fotocopias en un despacho de abogados en Vitoria-Gasteiz, donde se hace la ley… donde solo hay dos estaciones: Invierno y la del tren.

  Ya dejó en su día a su novia en las puertas del altar para aparearse, debido a la citada codicia, con «No me consta, no sé nada, soy tonta«, con la que procreo una camada de niñas y niños requeteguapísimos, rubitos y supereducados. 

Toda una prole

. Pero Urdangarín tira más al monte que la cabra, o sea, que su aún suegro: hasta firmaba mails como «el duque empalmado«. 

No… Si guapo será lo que se quiera pero, luces, lo que son luces, menos que las de un barco pirata.  

Así que «La chica de la peca«, ha terminado como su madre: 

Destrozando los marcos de las puertas de palacio allá por donde pasan. 


 

Pero ahí siguen aguantando como jabatas las citadas y la otra hija (la «Infanta de Limón«). 

Evidentemente, estas no son de las de «Todo por la Patria» (o la «Matria«).

 Son más de «Todo por la pasta«. 

 A ver qué coño hace ahora el jefe de la casa real tras ver la portada de Semana. 

Supongo que estará mirando al infinito… 

Ni idea… A ver qué «genialidad» se les ocurre ahora.

 Lo que que está del todo claro es que anteayer tampoco volvió a ser un día feliz en Zarzuela. 

Consejo: Que vayan a inaugurar otra sede de Vocento para disimular un poco y para que les hagan genuflexiones los mandatarios locales para crear un sentimiento de vergüenza ajena a muchos ciudadanos (como es mi caso). 

 Mientras, el mangui de Abu Dhabi sigue partiéndose la caja. 

 Al menos, le han quitado del foco un ratito. 

  https://blogs.deia.eus/rincondelproteston

   



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