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| Pasará a la historia por desarticular al PP en Catalunya, Xavier García Albiol. |
La
cuarta entrega de la encuesta prohibida que la agencia GESOP acaba de
publicar, marca un incremento de dos puntos en favor de ERC que supera a
Arrimadas en una décima a costa de JxCat y la CUP.
En esta ocasión los
independentistas se sitúan por primera vez en la campaña en una
horquilla que va de 67 a 70 escaños cuando la mayoría absoluta se
encuentra en 68, es decir, lo tienen al alcance de la mano a solo dos
días del plebiscito.
Esta misma encuesta nos muestra un leve retroceso del PSOE y su candidato Iceta que se deja medio punto quedándose con 20-21 escaños. Uno de cada 4 electores de este partido hoy votarían a Cs.
Pero el "batacazo" mas duro se lo lleva el PP porque peligra la
posibilidad de tener grupo parlamentario propio, con lo que ello
significaría: que el partido que sujeta al gobierno no tiene
representantes democráticos en el parlamento catalán.
Este es el argumento por el cual tanto el presidente como la vicepresidenta del gobierno han desembarcado en Catalunya para hacer mas agresiva una campaña que les está siendo del todo desfavorable y es aquí donde podemos enmarcar las declaraciones de Sáenz de Santamaría en cuanto a jactarse de "descabezar" a fuerzas independentistas.
El presidente se
queda hasta el último minuto del cierre de campaña lo cual es bien
sintomático. Este era sin duda el nerviosismo que se ha incrustado en el
seno de PP catalán y que alarma a la dirección nacional de ese partido.
Xavier García Albiol, el candidato del PP sigue acaparando uno de los
mas bajos niveles de preferencia entre los catalanes como presidente y
ademas de esta dejando a 4 de cada 10 de sus votante en favor de Cs,
moviéndose en esta encuesta en torno al 4,8% y una horquilla de entre 4 y
5 escaños, lo que hace peligrar la formación de grupo parlamentario
propio.
Por otro lado, la estabilidad en lo referente a PODEMOS con respecto a los últimos sondéos son la tónica mas notable de una encuesta prohibida por nuestra ley D´Hont que no contempla una realidad virtual que desborda la capacidad de la propia ley de controlar las redes sociales y que no ha querido ser reformada por el PSOE y el PP porque favorece a sus intereses electorales.
Un saludo.
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