Sus propios ciudadanos, carne de cañón del imperialismo

Sus propios ciudadanos, carne de cañón del imperialismo

Han dado por concluído el operativo contra la planta de gas, que se ha saldado  con 23 rehenes muertos.

 

Además, Argelia dice haber encontrado 25 cuerpos más y desde Tokyo informan que no tienen noticias de 10 ciudadanos japoneses que se encontraban en la planta tomada por los milicianos islamistas.

Pese a ello, el socialfascista Hollande insiste: "La vida de cientos de personas debería constituir un argumento suplementario para justificar la intervención militar francesa en Malí". Hoy en Mali, mañana en cualquier otra parte.

El imperialismo es así, ni siquiera concede valor a las vidas de sus propios ciudadanos, expuestas a causa de sus aventuras coloniales, una auténtica carne de cañón que paga el pato de los crímenes que cometen estos países "civilizados".