Este sábado pasado el sindicato de Vox ha convocado manifestaciones por todo el solar patrio. Para Santiago Abascal la ruína que padecemos es por culpa del ejecutivo de Pedro Sánchez; que la inflación se dispare y que el precio de los combustibles se haya ido por las nubes es por culpa de Sánchez y no de la guerra de Ucrania.
Económicamente veníamos mal por la crisis del coronavirus y cuando la situación empezaba a mejorar vino Putin a joderlo todo.
Vox (en general la oposición) va a aprovechar esta crisis para atacar al Gobierno "socialcomunista". Gobierno que tiene de comunista lo mismo que Vox de demócrata. Los EE. UU., principal potencia económica y productor de petroleo está acusando también la subida de los combustibles: El precio de la gasolina sigue creciendo en Estados Unidos, y con él el pánico de millones de conductores en Los Ángeles, la gran ciudad motorizada en Estados Unidos.
Las marquesinas de centenares de estaciones de servicio mostraron la semana pasada precios que se acercaban a los ocho dólares por galón. La subida de los precios ha dado una tregua este fin de semana, pero los expertos aseguran que la gasolina y el diésel seguirán provocando inquietud tras el volante en semanas de presión inflacionaria y por la guerra en Ucrania.
Y en el país de las "libertades"no gobierna ningún "socialcomunista". El problema no es el comunismo en Europa o Estados Unidos, comunismo que por otra parte no existe, no existe ya ni en la China capitalista. En China no hay libertad política pero económicamente se rigen por los mismos principios capitalistas que en cualquier democracia. Entonces pues, el problema no es el comunismo sino el capitalismo.
Un sistema que se avería con extrema facilidad. "Comunismo o libertad", con ese simple y falaz lema ganó las elecciones Isabel Díaz Ayuso. Si nos fijamos en el cartel de la fotografía que ilustra este artículo, tambien hacen mención al comunismo en un mitin de Santiago Abascal: "TELEVISIONES COMUNISTAS MANTIENEN A UN GOBIERNO COMUNISTA".
Tanto repetir el mantra de un supuesto Gobierno comunista que muchos votantes de la derecha ven a Pedro Sánchez como un peligroso bolchevique. Ni Podemos llegan a ser comunistas, y del PCE habría que hablar de eurocomunista ("El comunismo occidental renunció al modelo soviético y aceptó las libertades burguesas". Julián Casanova en El País).
A pesar de estas realidades más que obvias, muchos españoles ven en España el peligro comunitsa. Peligro que no existió siquiera en los años 30 de la II República (todo fue un bulo promovido por la reacción). El PCE era un partido minúsculo con muy poca representación institucional (Stalin tampoco había puesto los ojos en la España republicana), y en las elecciones que que ganó el Frente Popular, el Gobierno que se conformó fue un ejecutivo de la izquierda burguesa republicana, no hubo ni ministros comunistas ni socialistas.
Por tanto me pregunto como pueden ver los votantes de Vox a Atresmedia, Mediaset o RTVE, como entes que promueven el comunismo. ¿Saben en realidad lo que es el comunismo? ¿Saben distinguir entre Stalin o Nikita Jrushchov? ¿Saben qué fue el proceso de desestalinización en la URSS? ¿Saben que la cifra de 100 millones de muertos por el comunismo es una cifra inventada por Aleksandr Solzhenitsyn sin base científica alguna?
Desconocen muchas cosas, por eso ven a Susanna Griso y a Ana Rosa Quintana como agentes encubiertas del comunismo.
Los votantes de las derechas se piensan que cobrar impuestos es de comunistas y bajarlos es de demoócratas liberales. Lo primero que hizo Mariano Rajoy al llegar a la Moncloa fue subir todos los impuestos y aumentar la deuda pública.
El país inmerso en una grave crisis necesitaba mucho dinero para seguir mantiniéndose.
Según los trevijanistas y ciertos neoliberales, la culpa de todo también la tienen el gasto de las 17 autonomías. Esto es otra falacia ineteresada.
Además, llevamos cuarenta años con el Estado de las autonomías y estos problemas presupuestarios solo aparecen en épocas de crisis. Por tanto es fácil atisbar cual es el verdadero problema, y no son las autonomías ni, por supuesto, el comunismo.
El problema viene por lo que defiende precisamente Vox, el capitalismo neoliberal, pero según Vox vivimos en un país comunista. ¡Y nosotros sin enterarnos!
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