La prensa ha dicho estos días, y como si fuera una noticia inesperada, - cosa que no llego a entender, porque para todo el mundo, menos para Mariano Rajoy, era cosa de esperar – que gracias a los recortes de nuestro ínclito Presidente de Gobierno, la recesión se ha agudizado y ha decrecido un 0,4 % en el segundo trimestre del año, una décima más que entre Enero y Marzo, y a buen seguro (como la medalla del amor) y con suerte, una décima menos que entre Julio y Septiembre.
Por otra parte, nos enteramos que en el mismo trimestre, la remuneración de los asalariados ha descendido un 3,9 %, mientras que los beneficios empresariales mantienen un crecimiento de un 3,4 %.
Es decir, que en contra de lo que muchos malpensados puedan decir, los recortes de Don Mariano han conseguido el efecto deseado; una clase trabajadora cada vez menos numerosa, más pobre, y sin derechos sociales, y un empresariado que comienza a despegar, libre de los antiguos compromisos con sus trabajadores.
¿Y todo gracias a quién? Independientemente de nuestro gobierno, a nuestra amada Europa y su política neoliberal ordenada por una “troika” (Comisión Europea, Banco Central Europeo, y Fondo Monetario Internacional) que nadie ha elegido, pero ahí están imponiendo medidas que nadie desea, pero que se obedecen, que recortan los derechos sociales, pero se llevan adelante, que eliminan la democracia, pero se imponen, que están desmantelando el estado del bienestar, pero se aceptan.
Se gobierna por y para la banca y el capital, incluido,
chanchullos varios, chorizamen, afanamientos y trinques varios
¿Qué está pasando en Europa? ¿Cómo es posible que en apenas dos años se desmantele una Europa que ha tardado 50 años en construirse? La mayoría de la derecha y del mal llamado “centro” en el Europarlamento, junto con algunos países recién incorporados del este con mayorías de ultraderecha, como Hungría, Eslovenia, Bulgaria, Rumanía, que siguen a ciegas las políticas de austeridad mandadas por la “troika”, al igual que España, junto a la vergonzosa toma del poder por parte de tecnócratas de la banca cuya política está destinada a hundir los países para que los compren sus bancos a buen precio, como son los casos de Grecia e Italia (y puede serlo de España) es en parte la culpable de ello.
Pero, ¿y nosotros?, el Pueblo. ¿Podemos seguir manteniéndonos ajenos a la usurpación de nuestra soberanía para ser utilizada en contra del bien común? La respuesta está en la misma pregunta, el bien común está por encima de todos los demás. No podemos seguir permitiendo que la ley y la justicia vayan por caminos diferentes, que quienes gobiernan no nos representen a nosotros, sino los intereses del capital, es decir, que gobiernen y legislen en contra del bien común, que la palabra democracia haya quedado hueca de contenido porque la han secuestrado y es nuestro deber rescatarla y volverla a rehacer desde sus orígenes, como tiene que ser: participativa y transparente.
El verbo cesar no se conoce porque todos han ido a colegios
de pago, y césar les suena a algo del Imperio Romano
Por gracia de los recortes
que Rajoy nos ha calzado
la recesión ha alcanzado
marcas, que como en deportes,
cada vez van mejorando
para ir un récord logrando.
También el asalariado
su estipendio ha descendido
y al mismo tiempo ha crecido
el lucro entre empresariado,
y aunque alguien piense al contrario,
Mariano es buen mandatario.
Lo perseguido ha logrado;
arruinar a toda España
por medio de su artimaña
de empobrecer el mercado
quitando dinero a todos
con algunos acomodos.
A la “troika” ha obedecido
como un siervo lo hace al amo
y ha corrido como un gamo
siempre que se lo han pedido,
mas lo que nunca ha logrado
es confianza del mercado.
que Rajoy nos ha calzado
la recesión ha alcanzado
marcas, que como en deportes,
cada vez van mejorando
para ir un récord logrando.
También el asalariado
su estipendio ha descendido
y al mismo tiempo ha crecido
el lucro entre empresariado,
y aunque alguien piense al contrario,
Mariano es buen mandatario.
Lo perseguido ha logrado;
arruinar a toda España
por medio de su artimaña
de empobrecer el mercado
quitando dinero a todos
con algunos acomodos.
A la “troika” ha obedecido
como un siervo lo hace al amo
y ha corrido como un gamo
siempre que se lo han pedido,
mas lo que nunca ha logrado
es confianza del mercado.
La igualdad y la justicia son la base de la globalización
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